Su ADN es el arte

De 51 años, el artista chihuahuense demuestra que el talento se hereda y es algo de lo que no se puede huir.

Alejandro Pinedo, proveniente de una familia de artistas, cuenta con una trayectoria en pintura que supera las dos décadas. Nacido en 1973 en la ciudad de Delicias, Alejandro explicó cómo influyó en su vida el crecer rodeado de personas dedicadas al arte.

“Vengo de una familia de artistas, tengo primos, hermanos, tíos y abuelos dedicados a la música, principalmente; de hecho, yo también empecé tocando el piano y de niño dibujé mucho”, señaló.

También explicó que, desde su infancia, se refugió en la pintura para crecer a nivel personal, cambiando así las tardes de juegos por tiempo de calidad con su hobby, el cual realizaba acompañado de su tío y de una gran inspiración.

Sin embargo, por un tiempo se alejó del pincel, retomándolo de manera esporádica en el 2001; no obstante, en el 2009 se le presentó una gran oportunidad: su primera exhibición individual en la Galería de Arte Contemporáneo en San Juan del Río, Querétaro, titulada La Mujer y sus perspectivas.

Por azares del destino, Alejandro regresó a su ciudad natal en el 2011, teniendo su primera exposición en el Teatro de la Ciudad. Más tarde, notando que su pasión era pintar, renunció a su profesión para dedicarse de lleno al arte.

Pinedo aseguró que en su camino ha aprendido que el destino es innegable y este consejo se lo transmite a las nuevas generaciones. “Creo que el principal consejo es dejar que el tiempo haga su trabajo, dejen que las cosas que están destinadas para nosotros lleguen, no se desesperen”, recomendó.

“Muchas veces queremos o empezamos a pintar un cuadro y ya queremos toda la gloria, el reconocimiento. La verdad es que no; es un proceso”.

De igual forma, dijo que las personas no deben desistir de sus sueños, más cuando se posee esa intuición y “esa chispa de que estás haciendo las cosas bien; lo importante es no rendirse”.

Actualmente, Alejandro, distinguido por sus obras de gran tamaño y muy cotizadas en el mercado, es miembro de la Sociedad Mexicana de Interioristas y cuenta con clientes en ciudades como Cancún, Mazatlán, Los Cabos, Chihuahua y El Paso, Texas.